Conócete a ti mismo, Respeto, Libertad, Igualdad, Dignidad, Amistad,Responsabilidad, Tolerancia,Diálogo, Pensamiento Solidaridad, Felicidad, Paz, Vida... Yo, Tú, Él, Ella, Nosotr@s, TOD@S
Un nuevo curso...
Nuestro propósito:
Entender la ética en el marco de la vida misma.
Nosotros podemos transformar el mundo, con cada acción y decisión que tomamos. Pero ¿qué rumbo seguimos? ¿Qué propósitos tenemos? ¿Cuál es el camino a elegir?, ¿Qué debemos hacer? ... Intentar responder a estas preguntas es el cometido de la Ética, mejor dicho, ayudarnos a reflexionar sobre nuestro propio pensamiento, sobre nuestro modo de conocer y aquello que podemos conocer. Reflexionar sobre mí, sobre el otro y sobre el mundo que nos rodea.
La ética pretende ser universal, sin embargo no quiere universalizar nuestros sistemas de pensamiento, creencias y costumbres. La intención es encontrar aquello que es común a la humanidad, aquello con lo que todos podamos vivir una vida justa y libre.
La humanidad tiene que caminar hacia el horizonte del propio desplegar, lo que significa liberarse de la ignorancia, el dogmatismo, el miedo y el odio al otro. Tenemos que reconocer que todo ser humano tiene un valor intrínseco y, por ende, extenderlo a todo ser vivo.
sábado, 25 de diciembre de 2010
La paz
lunes, 20 de diciembre de 2010
Como hacer un trabajo
Debemos empezar por saber que la amplitud del trabajo no es lo más importante, el mejor trabajo no es el más largo. ¿Qué hay que tener en cuenta? La claridad; Un trabajo es preferible cuando es breve y claro.
En primer lugar debemos huir del “copia y pega” que nos hace perder el tiempo y no nos aporta nada. Los documentos que vayamos a utilizar los tenemos que leer, reflexionar sobre ellos, tal vez discutir en clase sobre las dudas que la información recopilada nos haya suscitado. Sobre cada texto leído ( y no sobre muchos, Ya sabéis que quien mucho aprieta poco abarca) debemos sacar una conclusión y anotarla. Nuestras anotaciones deben estar ordenadas y fácilmente comprensibles ya que el siguiente paso es volver sobre ellas para realizar el trabajo. De dichas anotaciones debemos recoger algunas ideas fundamentales que hayamos entendido y lo demás rechazarlo.
Ahora viene lo difícil, la redacción del trabajo: conseguir una estructura clara en la que nuestra información quede agrupada y encontremos relaciones entre las ideas seleccionadas. En este punto debemos ser muy claros a la hora de redactar.
¿Cómo hacerlo?
Una herramienta que nos puede ayudar a la hora de realizar el trabajo es la realización de un esquema:
· Introducción, en este punto podéis exponer el tema del trabajo, enumerar sus partes y explicar las relaciones que existen.
· Parte central del trabajo, en este punto se exponen los contenidos nombrados en la introducción, es el momento del desarrollo. Si lo necesitáis para aumentar la claridad o la comprensión, podéis dividir en epígrafes los puntos anteriores. Los títulos que pongáis pueden hacer referencia a la idea principal que vayáis a tratar.
· Conclusión, Se resume todo el contenido anterior, se realiza una valoración del problema tratado y se relaciona con otros problemas afines. También es esta apartado podéis añadir vuestra opinión personal.
La realización de un trabajo no es algo imposible ni muy complicado... más bien requiere de vuestro esfuerzo y paciencia, es una labor continuada que no se caracteriza por la inmediatez.
Otra herramienta esencial a la hora de realizar un buen trabajo es vuestra imaginación y vuestra capacidad creativa y la capacidad de disfrutar haciéndolo.
jueves, 16 de diciembre de 2010
Preámbulo de la Constitución de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura
Los gobiernos de los Estados Partes en la presente Constitución, en nombre de sus pueblos, declaran:
Que, puesto que las guerras nacen en la mente de los hombres, es en la mente de los hombres donde deben erigirse los baluartes de la paz;
Que, en el curso de la historia, la incomprensión mutua de los pueblos ha sido motivo de desconfianza y recelo entre las naciones, y causa de que sus desacuerdos hayan degenerado en guerra con harta frecuencia;
Que la grande y terrible guerra que acaba de terminar no hubiera sido posible sin la negación de los principios democráticos de la dignidad, la igualdad y el respeto mutuo de los hombres, y sin la voluntad de sustituir tales principios, explotando los prejuicios y la ignorancia, por el dogma de la desigualdad de los hombres y de las razas;
Que la amplia difusión de la cultura y la educación de la humanidad para la justicia, la libertad y la paz son indispensables a la dignidad del hombre y constituyen un deber sagrado que todas las naciones han de cumplir con un espíritu de responsabilidad y de ayuda mutua;
Que una paz fundada exclusivamente en acuerdos políticos y económicos entre gobiernos no podría obtener el apoyo unánime, sincero y perdurable de los pueblos, y que, por consiguiente, esa paz debe basarse en la solidaridad intelectual y moral de la humanidad.
Por estas razones, los Estados Partes en la presente Constitución, persuadidos de la necesidad de asegurar a todos el pleno e igual acceso a la educación, la posibilidad de investigar libremente la verdad objetiva y el libre intercambio de ideas y de conocimientos, resuelven desarrollar e intensificar las relaciones entre sus pueblos, a fin de que éstos se comprendan mejor entre sí y adquieran un conocimiento más preciso y verdadero de sus respectivas vidas. En consecuencia, crean por la presente la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, con el fin de alcanzar gradualmente, mediante la cooperación de las naciones del mundo en las esferas de la educación, de la ciencia y de la cultura, los objetivos de paz internacional y de bienestar general de la humanidad, para el logro de los cuales se han establecido las Naciones Unidas, como proclama su Carta.